En un mundo donde el flujo de información es constante, aprender a tomar notas y recordar lo que leemos se ha convertido en una habilidad esencial para los estudiantes universitarios. Pero, ¿cuál es la mejor forma de hacerlo? Tanto la ciencia cognitiva como la espiritualidad coinciden en que la clave está en una combinación de técnicas efectivas y el uso de herramientas adecuadas que nos permitan procesar, retener y aplicar el conocimiento de manera más eficiente.
Este artículo tiene como objetivo guiar a los jóvenes estudiantes en cómo tomar notas de forma efectiva, y cómo recordar lo que leen, basándonos en investigaciones científicas y en el uso de herramientas tecnológicas que potencien estas capacidades. Al mismo tiempo, exploraremos cómo el enfoque en el «buen vivir», armonizando la ciencia con la espiritualidad, puede mejorar la calidad de nuestro aprendizaje y desarrollo personal.
1. La importancia de una buena toma de notas
Tomar notas no solo es una forma de recordar información, sino también un método activo de aprendizaje. Investigaciones en psicología cognitiva sugieren que tomar notas a mano o digitalmente involucra una mayor participación cognitiva, lo que fortalece la comprensión y la retención a largo plazo.
El Dr. Robert A. Bjork, profesor de Psicología en la Universidad de California, es conocido por su trabajo en la ciencia de la memoria y el aprendizaje. Según Bjork, cuando tomamos notas, estamos codificando la información de manera activa, lo que mejora nuestra capacidad para recordarla. Esto se debe a lo que se conoce como «esfuerzo de recuperación»: cuando intentamos recordar algo, fortalecemos las conexiones neuronales asociadas con esa información.
Aplicación práctica: La técnica de Cornell
La Técnica de Cornell, desarrollada por el profesor Walter Pauk en la Universidad de Cornell, es una de las formas más recomendadas para tomar notas de manera estructurada. La página se divide en tres secciones: una columna para las notas, una columna para preguntas o palabras clave, y un resumen al final de la página. Este formato organiza la información de manera lógica, facilitando la revisión y el estudio posterior.
- Notas: Escribe los conceptos principales durante la lectura o la clase.
- Preguntas o palabras clave: Después de la lectura, escribe preguntas sobre los conceptos más importantes o define términos clave en la columna de la izquierda.
- Resumen: Al final de cada página, escribe un breve resumen de lo que aprendiste. Esta sección te ayudará a consolidar la información.
Esta técnica es recomendada por universidades de prestigio como Harvard y Stanford, ya que facilita la comprensión y retención de grandes volúmenes de información de manera eficiente.
2. La ciencia detrás de la memoria y el aprendizaje
La neurociencia ha demostrado que el proceso de recordar lo que leemos no depende solo de la repetición, sino de cómo estructuramos y aplicamos la información. El psicólogo John Sweller, creador de la teoría de la «carga cognitiva», explica que la mente tiene una capacidad limitada para procesar información a la vez. Por ello, las estrategias de aprendizaje deben reducir la carga innecesaria y hacer que la información sea más digerible.
Una técnica eficaz es el spaced repetition (repetición espaciada), que sugiere que revisemos la información en intervalos crecientes para mejorar la retención. Este enfoque ha sido respaldado por investigaciones del Dr. Hermann Ebbinghaus, quien descubrió que el olvido sigue un patrón predecible: perdemos la mayor parte de lo que aprendemos si no lo revisamos en los días o semanas posteriores. La repetición espaciada ayuda a combatir esta curva de olvido.
Aplicación práctica: Uso de herramientas digitales
Existen herramientas informáticas que facilitan la aplicación de estas técnicas. Aplicaciones como Anki o Quizlet están diseñadas para utilizar la repetición espaciada de manera eficiente. Estas plataformas permiten crear tarjetas de estudio digitales que se presentan en intervalos programados, optimizando el proceso de revisión.
Además, herramientas como Notion y Evernote ofrecen espacios de trabajo digitales donde puedes organizar tus notas, agregar comentarios y realizar búsquedas rápidas. Estas aplicaciones también permiten sincronizar la información en todos tus dispositivos, lo que facilita el acceso a tus notas desde cualquier lugar.
3. El enfoque espiritual en el aprendizaje: el poder de la atención plena
Si bien las técnicas científicas para tomar notas y recordar lo que leemos son fundamentales, la espiritualidad también ofrece herramientas valiosas para mejorar nuestro aprendizaje. La práctica de la atención plena (mindfulness), por ejemplo, ha demostrado tener un impacto positivo en la capacidad de concentración y en la memoria.
El Dr. Jon Kabat-Zinn, pionero en el estudio de la atención plena, ha mostrado que practicar mindfulness reduce el estrés y mejora la capacidad de prestar atención. Esto es especialmente relevante para los estudiantes, ya que mantener la concentración es clave para absorber información de manera efectiva. La atención plena nos enseña a estar presentes en el momento, lo que permite que nuestra mente se enfoque de manera plena en lo que estamos leyendo o escribiendo.
Aplicación práctica: Incorporar la atención plena en el estudio
Antes de comenzar una sesión de estudio o lectura, dedica unos minutos a practicar la respiración consciente. Cierra los ojos, respira profundamente y enfócate en tu respiración. Esta pequeña pausa te ayudará a despejar la mente y a mejorar tu capacidad de atención en lo que estás a punto de leer o aprender.
Combinar la atención plena con técnicas científicas de toma de notas crea un enfoque holístico hacia el aprendizaje, mejorando no solo tu rendimiento académico, sino también tu bienestar general.
4. Organizaciones y personalidades que promueven estas prácticas
Organizaciones como el Center for Contemplative Mind in Society promueven el uso de la atención plena en la educación, subrayando sus beneficios para la salud mental y el rendimiento académico. En paralelo, instituciones de renombre como el Massachusetts Institute of Technology (MIT) han integrado la neurociencia del aprendizaje en sus programas educativos, destacando la importancia de herramientas como la repetición espaciada y la toma efectiva de notas.
Por otro lado, figuras influyentes como el psicólogo y educador Tony Buzan, creador de los mapas mentales, han defendido la necesidad de organizar la información visualmente para facilitar la comprensión y el recuerdo. Sus técnicas han sido adoptadas por estudiantes y profesionales de todo el mundo, y están diseñadas para aprovechar al máximo la forma en que el cerebro procesa la información.
5. Conclusión: Un enfoque integral para el aprendizaje
Para los estudiantes universitarios que buscan mejorar su rendimiento académico y su calidad de vida, la mejor forma de tomar notas y recordar lo que leen radica en combinar el conocimiento científico con prácticas de bienestar. Técnicas como la repetición espaciada, la atención plena y el uso de herramientas digitales modernas son fundamentales para optimizar el aprendizaje.
Al adoptar un enfoque que armoniza la ciencia y la espiritualidad, los jóvenes pueden no solo mejorar su capacidad de retención, sino también reducir el estrés y aumentar su bienestar general. Al final, el buen vivir no se trata solo de acumular información, sino de integrarla de manera consciente y significativa en nuestras vidas.
Invito a los estudiantes a explorar y aplicar estas técnicas, y a utilizar las herramientas a su disposición para maximizar su potencial académico y personal. Al igual que la música y el arte, el aprendizaje es un camino que nos permite conectar con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea, y hacerlo de manera consciente nos ayudará a vivir de manera más plena y equilibrada.